Reserva marina del entorno de la Punta de La Restinga-Mar de las Calmas

La Reserva Marina del Entorno de la Punta de La Restinga-Mar de Las Calmas es un área protegida situada en la costa sur de la isla de El Hierro. Esta reserva marina se creó en 1996 y cubre una superficie de 750 hectáreas, extendiéndose desde la Punta de La Restinga hasta el extremo sur de la isla y constituye la reserva marina más meridional de Europa.

La Reserva Marina del Entorno de la Punta de La Restinga-Mar de Las Calmas es conocida por su gran riqueza biológica, con una gran variedad de especies marinas y hábitats submarinos.

La zona cuenta con las aguas más cálidas de todo el archipiélago, lo que permite el desarrollo de comunidades de afinidades tropicales que son poco frecuentes en otras islas. El lecho marino presenta una topografía rocosa y abrupta, con impresionantes formaciones geológicas como veriles, cuevas, túneles y bajones, destacando El Bajón y La Punta de Los Saltos. La cobertura vegetal es densa, predominando las algas calcáreas y pardas que otorgan un aspecto único al paisaje submarino.

La Reserva Marina de La Restinga es un santuario del buceo reconocido internacionalmente donde acuden cada año numerosas especies de animales, como el tiburón ballena (Rhincodon typus) y la manta diablo (Manta birostris). Además se pueden observar con frecuencia tortugas marinas y delfines. Entre los cetáceos también hay una población residente de zifios, grupo de gran interés, cuyo estudio es complejo dado sus hábitos esquivos.

A raíz de las erupciones volcánicas que tuvieron lugar en el año 2011, sus fondos marinos se han regenerado, dando lugar a una particular biodiversidad y un paisaje submarino único y lleno de vida, perfecto para practicar el submarinismo en todas sus variedades.

También es un lugar de interés científico, con numerosas investigaciones en curso sobre la biodiversidad y los ecosistemas marinos de la zona.

El objetivo de la Reserva Marina del Entorno de la Punta de La Restinga-Mar de Las Calmas es preservar la biodiversidad y los ecosistemas marinos de la zona, así como fomentar la investigación científica y el turismo sostenible en la región. Se anima a los visitantes a respetar el medio ambiente y seguir las normas establecidas para proteger la fauna y la flora marinas de la reserva.